Renfe ha anunciado que eliminar las rutas ferroviarias que no le sean rentables, alterando así las facilidades de los millones de viajeros españoles que cada día utilizan los trenes de la compañía para trasladarse.
Esta política forma parte de la política de rentabilidad de la empresa y así es como aquéllos servicios que no le resulten rentables serán eliminados. Para mantenerlos, el Estado o las comunidades autónomas deberán costearlos por su cuenta.
Los servicios afectados son tanto los de Cercanías como los de Media Distancia, cuya rentabilidad será evaluada por el operador ferroviario para luego establecer las suspensiones.
Pero esta no es la única mala noticia para los pasajeros españoles pues también hay que sumar el aumento del precio de los boletos que Renfe anunció para 2010.
Vía lasescapadas.com