Santiago de Compostela, donde no es necesario ver para creer

Escrito el 20 de Diciembre de 2010 por turisticut

Santiago de Compostela es una de esas ciudades con mística. Su importancia religiosa y la intensidad de una tierra que ha sido más prestigiosa aún cuando Paulo Coelho decidió convertirla en el escenario principal de su obra El Peregrino (sin olvidar que menciona a la urbe en prácticamente todos sus textos), nos invita a empaparnos de historia, fe y sabiduría.

Es que en la Comunidad Autónoma de Galicia no hay otra ciudad que sea tan importante para los religiosos. Cada año llegan aquí miles y miles de peregrinos de todo el mundo para honrar al santo que le da el nombre a la urbe. Colmados de esperanza, llegan como agradecimiento o en busca de una solución pero todos bajo el mismo lema: creer.

Los vuelos baratos a Santiago de Compostela nos permiten llegar a una metrópoli que tiene mucho para contarnos. Un territorio colmado de esperanza y que transmite eso en el aire. La atmósfera es distinta aquí y todo parece cambiar cuando nos ponemos en contacto con la verdadera esencia de la ciudad.

Son muchos los encantos de Santiago de Compostela y más allá de que la mayor parte de ellos tienen una estrecha relación con el mundo de la fe, es importante remarcar que los amantes de la arquitectura también se sienten muy a gusto aquí. Los ejemplares edilicios son realmente atractivos y dejan maravillados a quienes lo miren.

Una de las visitas obligadas en la metrópoli es, lógicamente, el principal edificio religioso: la Catedral que lleva el mismo nombre de la ciudad. Construida con un espectacular estilo barroco propio del siglo XVIII es una de las obras constructivas más impresionantes del territorio.

Bella por donde la mires, es una iglesia que transmite mucho más que fe. Nos deja atónitos con su magnificencia y nos invita a descubrirla también por dentro. Por su parte,  el Monasterio Benedictino de San Pinario es otro ejemplo de la arquitectura barroca que se impone en la ciudad gracias a la espectacular escultura que se levantó en honor a San Martín de Tours.

Sin lugar a dudas, la materia religiosa es muy importante en Santiago de Compostela y si a eso le sumamos el encanto de sus calles empedradas, es posible trasladarnos a un mundo de historia y fe muy particular.

Pocos lugares del mundo tienen la capacidad de transmitir tanto con un solo paseo a pie. Sin embargo, la ciudad gallega nos invita a olvidarnos de todo y conectarnos de una manera especial con sus encantos y su tradición.

Vía Dónde viajar

Peñaranda de Duero, Conjunto Histórico en Burgos

Escrito el 25 de Octubre de 2010 por turisticut

A 87 kilómetros de Burgos, en plena comarca de la Ribera burgalesa del Duero, nos encontramos este pueblecito de apenas 650 habitantes, Peñaranda de Duero, que cada fin de semana se llena de turistas con ganas de disfrutar, además de sus buenos vinos, de un casco urbano plagado de monumentos que está declarado Conjunto Histórico Artístico.

Lo mejor es comenzar visitando el espacio más bonito de Peñaranda, su empedrada Plaza Mayor. Aquí podremos disfrutar de los edificios más emblemáticos de la villa. Entre ellos no podemos dejar de mencionar el Palacio de Avellaneda que, conocido popularmente como “el palacio”, cuenta con varios salones visitables, entre ellos y de gran belleza, el Salón de Embajadores. Frente al palacio se encuentra la iglesia de Santa Ana (Ex Colegiata), con una espectacular fachada barroca. Su interior acoge el sepulcro del padre de Eugenia de Montijo, esposa de Napoleón III. En la Plaza Mayor también encontramos el rollo jurisdiccional de época medieval, que puede presumir de ser el mejor conservado de la provincia.

Visita también el Castillo que, declarado Monumento Nacional, fue levantado para marcar la frontera entre moros y cristianos; la ermita de la Virgen de los Remedios, patrona de la villa y la Botica.

Termina la visita con un agradable paseo por la Calle Real.

Peñaranda de Duero es un buen punto de partida para conocer otras poblaciones de gran interés. Entre ellas destaca Aranda de Duero, capital de la comarca. Aquí podrás disfrutar, además de una gran oferta gastronómica, de monumentos tan interesantes como la iglesia de Santo Domingo, la iglesia de Santa María o la ermita de la Virgen de las Viñas.

Vía dondeviajamos.com

Una ruta romántica por Baviera

Escrito el 8 de Febrero de 2010 por turisticut

Mi propuesta de hoy es una Ruta romántica por Baviera (Romantische Strasse), un inolvidable recorrido por lugares donde la historia ha escrito páginas memorables de batallas, caballeros, príncipes y princesas, que se extiende 290 kilómetros desde Würzburg hasta Füssen, en la frontera con Austria,

residenzLa ruta se inicia en Wurzburg, famoso por su glorioso palacio barroco “la Residenz“. El palacio fue creado por el arquitecto Balthasar Neumann en 1720, sufragado por los príncipes obispos que harían de ella su casa. En cuanto uno entra en la Residenz, la presencia de una monumental escalera, la más grande del país, nos recuerda que nos encontramos ante uno de los edificios más suntuosos de Europa. Continuamos visitando la ciudad,  poseedora de uno de los cascos históricos más bellos de Europa, recorriendo su Catedral, la Plaza del Mercado, y el viejo puente sobre el río Maine que cruza la ciudad.

lauda-koenigshofenA 30 kilómetros de Wurzburg, atravesamos Tauberbischofsheim, la principal ciudad del distrito de Main-Tauber. Protegida por el Valle del Tauber, es una de las ciudades más antiguas de la Ruta. Allí visitaremos su centro histórico y el Castillo Kurmainz y su Torre Turmer y nos dejaremos sorprender por el curioso edificio del Ayuntamiento en la Plaza del Mercado. A sólo 10 kilómetros de aquí se halla Lauda-Königshofen, otro pueblo rodeado de viñedos, con magníficos caldos, con maravillosos puentes, casas de madera casi salidas de un cuento de niños, y sobre todo encantadoras rutas de senderismo alrededor del pueblo.

Seguimos nuestra ruta, atravesando Bad Mergentheim, la antigua ciudad de residencia de los Caballeros Teutónicos, con su Castillo de la Orden Teutónica y otro centro histórico completamente de madera, arracimado en torno al Ayuntamiento de estilo renacentista. Llegamos a Wikersheim, sede de los Condes de Hohenlohe, con enormes jardines al estilo de Versalles, hasta acercarnos a Rottingen, una pequeña ciudad rodeada de fortificaciones y torres que se ve realmente preciosa desde la carretera, destacando sobremanera por encima de los tejados de sus casas la figura del Castillo Brattenstein. No dejéis tampoco de visitar aquí su centro histórico, igualmente de madera como el de sus vecinos.

Nuestro siguiente lugar de paso es la pequeña ciudad medieval de Creglingen, dormida entre montañas, con su Barrio Judío y el Parque Munsterseen, un lugar precioso para pernoctar en sus casitas rurales. Así llegamos a otro de los puntos clave de esta Ruta Romántica, Rothenburg ob der Tauber o el castillo rojo sobre el Tauber, uno de los pueblos medievales mejor conservados de toda Europa. Una ciudad preciosa con flores que cuelgan desde las jardineras de las ventanas, casas inclinadas con entramado de madera, murallas de más de kilómetro y medio de largo y un ayuntamiento del siglo XIII.

feuchtwangen_marktplatzAtravesando el Castillo de los Príncipes de Hohenlohe en Schillingsfürst, llegamos a Feuchtwangen, en el kilómetro 130 de nuestra Ruta, donde se celebra una de las Fiestas más importantes de Baviera. A su lado, Dinkelsbühl, con un precioso casco histórico con 16 torres, fortificaciones, un precioso y enorme molino, y los encantadores Rothenburger, estanques que se extienden a lo largo de la muralla. Durante la noche aún se puede ver un vigilante que recorre el casco antiguo de la ciudad con un farol en la mano.

Llegamos así a Nordlingen, otra ciudad medieval que alberga el mejor templo de la arquitectura rococó, el Wieskirche, que se alza maravilloso en su prado alpino, y la Iglesia de San Jorge, con su campanario de 90 metros de altura, desde cuya altura un pregonero anuncia las noticias acaecidas en la ciudad. A pocos kilómetros de allí el pequeño pueblo de Harburg nos recibe con su imponente fortaleza de tejados en cono rojo, uno de los castillos mejor conservados de toda la Ruta.

Uno de las últimas destinos de esta ruta romántica por Baviera es Ausgburgo, una de las ciudades alemanas más antiguas, fundada por el Emperador Augusto hace 2000 años. Y concluyendo ya el maravilloso paseo medieval, visitamos los castillos reales de Ludwig, los de Hohenschwangau y Neuschwanstein, ya en el extremo sur, lindando con la frontera austríaca.

Vía sobreturismo.com